Los tratamientos de Medicina Estética están muy extendidos tanto en hombres como en mujeres. A todos nos gusta vernos mejor y los tratamientos estéticos nos permiten obtener resultados naturales y prácticamente inmediatos sin la necesidad de someterse a cirugía.
Generalmente, los tratamientos de medicina estética facial o corporal se realizan en tres fases:
- En primer lugar se realiza una valoración inicial por el médico estético.
- Selección y aplicación del tratamiento o combinación de tratamientos más adecuados según las necesidades específicas y las expectativas de cada persona.
- Cuidados después del tratamiento. Algunos de ellos tendrán lugar en la Cínica de Medicina Estética y otros se realizarán en casa.
¿Cuáles son los tratamientos estéticos más demandados?
Entre los más solicitados son los relacionados con el rejuvenecimiento facial, corrección de arrugas y surcos y mejora del aspecto de la piel como los rellenos con ácido hialurónico, peelings, mesoterapia facial, tratamientos con toxina botulínica (bótox), los peelings químicos para mejorar el aspecto en cicatrices y marcas producidas por el acné, tratamientos con plasma rico en plaquetas (PRP), etc.
¿Son importantes los cuidados después de un tratamiento de estética?
La mayoría de las prácticas médico estéticas son intervenciones poco invasivas, sencillas y que no requieren una larga recuperación.
Los cuidados tras realizar un tratamiento estético pueden tener como objetivo potenciar o acelerar los resultados del tratamiento, facilitar la recuperación o evitar que aparezcan efectos secundarios. Además de los cuidados específicos, hay una serie de medidas que debemos tener siempre en cuenta si queremos cuidarnos y sacar el máximo partido a los tratamientos estéticos:
- Protección solar. Es sin duda el tratamiento estrella para el cuidado de la piel tanto antes como después de someterse a un tratamiento. Los rayos UV del sol aceleran el envejecimiento cutáneo, favorece la aparición de manchas y hace que nuestra piel sea más susceptible a las lesiones. Es importante proteger nuestra piel de los efectos nocivos del sol, incluso en los días nublados.
- Una alimentación sana y equilibrada, una correcta hidratación, realizar ejercicio físico de forma regular y controlar el estrés también son también factores importantes a tener en cuenta, ya que no solo contribuyen a obtener mejores resultados después de un tratamiento de estética, sino que también favorecen a que estos se mantengan. Si queremos tener un buen aspecto debemos comenzar a cuidarnos desde el interior.
En general los cuidados posteriores a los procedimientos de estética incluyen cremas específicas para minimizar la aparición de hematomas en el caso de que el tratamiento incluya el uso de agujas, cremas y lociones para calmar la piel y ayudar a su regeneración, mascarillas y cremas hidratantes, etc.